Reseña: Colinas Negras (Nora Roberts)

Colinas Negras · Nora Roberts

Black Hills
Debolsillo (RHM) · 2013 · 512 pág.
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Nadie conoce la belleza y los peligros que encierra el paisaje indómito de las Colinas Negras, en Dakota del Sur, como Cooper y Lillian. Lo recorrieron juntos, palmo a palmo, durante todos aquellos veranos de la infancia, cuando la aventura esperaba en cada recodo del sendero. Años después esas mismas montañas fueron el escenario de su primer beso y de ese primer amor que se graba en el alma. Y entonces la vida separó sus caminos. Doce años después el destino les ha traído de vuelta a las Colinas Negras. Ha pasado el tiempo y ninguno de los dos ha conseguido olvidar el sabor de aquellos días del pasado. Pero mientras ambos se adentran de nuevo en el territorio familiar e inhóspito a la vez del amor verdadero, algo o alguien despiadado y feroz les sigue el rastro con el único objetivo de convertirlos en su próxima presa.

Una historia de amores y odios imperecederos, de animales salvajes y de paisajes bellos y recónditos donde únicamente rige la ley de la naturaleza.

Nora Roberts es una de esas autoras que puedes escoger con seguridad al momento de decidirte por una historia romántica. Con sus series como "Cuatro Bodas" conquistó con un romanticismo absoluto y su mirada a la vida de cuatro talentosas organizadoras de bodas; ahora, en Colinas Negras nos lleva por un nuevo camino, con una historia que resalta la sabiduría de la naturaleza y el resolver problemas del pasado para encontrar la felicidad.

Nuestros protagonistas Cooper y Lil se conocen desde niños, crecieron juntos en Colinas Negras y a medida que se hicieron mayores su relación avanzó desde una amistad inocente a un romance bastante intenso que duró hasta que tuvieron que separarse para seguir sus propios caminos. Lil siempre se sintió conectada a la naturaleza del lugar, especialmente a la fauna del lugar y por lo mismo cuando tuvo la oportunidad de especializarse en el tema y crear su propio refugio animal no lo dudó. Coop por otro lado, se fue a la academia de policía de donde -a pesar de las promesas que había hecho a Lil- nunca regresó. Lil ha intentado superarlo, ha tenido relaciones estables y gran parte de sus metas han sido alcanzadas, pero todo su balance se acaba cuando luego de regresar de un viaje se entera de que Coop ha regresado para quedarse.

Dos años antes aún era la Lil de siempre. Mona, sin duda, porque siempre había sido guapa. Pero apenas había pensado en ella como en una chica... y mucho menos como en una chica chica.

Me cuesta intentar describir este libro, porque no es la típica historia de la autora. ¿Por qué? Porque sorprendentemente el romance juega un papel secundario en toda la trama, lo que no es algo que Roberts suela hacer. Y para mí funcionó, creo que el rol de la descripción: de los bosques, de cómo Lil alimenta su pasión y fascinación por la vida salvaje, de cómo se comportan los animales es algo que incluso llegas a sentir. Está por ahí la conexión que tiene la protagonista con los pumas y hay escenas realmente hermosas sobre el tema y que no esperaba encontrar en una historia como esta.

Ahora, hay un motivo específico por el que me agradó que el romance no fuera tan relevante y fue que Cooper no me gustó demasiado. Su personalidad de "aquí se hacen las cosas solo a mi manera" me desagradó desde su regreso, especialmente porque quiere que todo vaya a su manera a pesar de haber sido él quien dejó a Lil. Aunque tengo un buen recuerdo de la mayoría de los protagonistas creados por NR, Cooper queda fuera de la lista a pesar de ser físicamente perfecto (o casi). Por otro lado los personajes secundarios, especialmente los padres y abuelos de los protagonistas son bastante modernos para estar en un sitio tan alejado de las grandes ciudades, aportando el toque de humor que a veces se necesita para disolver la tensión de la pareja.

—Nada de contacto físico ni sexual. Esa es otra norma.
—Con la que no estoy de acuerdo. Elige otra.
—Esto no está bien, Coop. No es justo.
—No sé si está bien o no. Me da igual si es justo o no —espetó Coop en tono tan indiferente como un encogimiento de hombros—. Te deseo. Sé como renunciar a lo que deseo y también sé cómo perseguirlo. Es cuestión de decidirse.

El punto fuerte de la trama lo otorga una serie de situaciones extrañas que comienzan a suceder a Lil y que están relacionadas con un evento de su pasado, un giro que le da un toque policial y de suspenso y el contrapunto perfecto para balancear la falta de una historia más romántica y pastelosa. También incluye por ahí algunas reflexiones bastante interesantes sobre la naturaleza y cómo impacta el hombre sobre ella. Una historia que dejará contentos a sus fans y que recomendaría especialmente aquellos que desean comenzar con esta clase de historias porque aunque el factor empalagoso está al mínimo, la esencia de los libros de la autora se mantiene y nunca está de más leer un final feliz.

Gracias a RHM por el ejemplar

Nora Roberts

NORA ROBERTS, la autora número 1 en ventas de The New York Times y «la escritora favorita de América», como la describió la revista The New Yorker, comentó en una ocasión: «Yo no escribo sobre Cenicientas que esperan sentadas a que venga a salvarlas su príncipe azul. Ellas se bastan y se sobran para salir adelante solas. El "príncipe" es como la paga extra, un complemento, algo más... pero no la única respuesta a sus problemas».

Más de cuatrocientos millones de ejemplares impresos de sus libros avalan la complicidad que Nora Roberts consigue establecer con mujeres de todo el mundo. El éxito de sus novelas es indudable, y quienes la leen una vez, repiten. Sabe hablar a las mujeres de hoy sobre sí mismas: sus lectoras son profesionales, fuertes e independientes, como los personajes que crea en sus libros, y sus historias llegan a un público femenino muy amplio porque son mucho más que novelas románticas.

Las cifras son fenomenales: Nora Roberts ha escrito más de 180 novelas que se publican en 34 países; se venden unas 27 novelas suyas cada minuto y 42 han debutado la primera semana de ventas en el codiciado número 1 de The New York Times. 

 

Estoy juntando miedo para un certamen de esta semana, si no me han visto por aquí es porque estoy en medio de la "primera ronda" de evaluaciones, también conocida como "las semanas en que comer/dormir/respirar/tenervida no es una prioridad y siempre deberías estar estudiando" u.u de momento voy sobreviviendo, así que deseenme suerte para lo que me queda ;)

¡699 ♥!